El señor Blair, se permite decir delante de la prensa -sin que nadie le parta la cara, of course- que grácias a la maldita prensa no ha podido gozar de la impunidad necesaria para cometer las trópelias que le pedía el cuerpo. Califica a estos de jauría salvaje y hemos de entender que de haber podido disfrutar de su aquiescencia -lease: de haber podido controlaros cabrones- Irak y todo cuanto contienen sus fronteras, a estas horas estaría reducido a mierda centrifugada. Hay que reconocerle, sin embargo, que aún sin gozar de la comprensión de los medios, el resultado obtenido - a día de hoy- se aproxima bastante a tal ideal escatológico.
Se lamenta el flemático carnicero -por ejercito interpuesto- de tales contratiempos y aboga -para evitarle trances parecidos a sus colegas en el futuro- por un mayor control de INTERNET. Así, una vez controlado el último reducto donde el ciudadano excéptico puede acceder y confrontar versiones distintas a las oficiales, todo solucionado: vía libre a la impunidad y a la falta de control sobre los "delegados" de nuestros intereses. ¿Fácil, no.?
Solo su exquisita educación británica le ha impedido tocarse los cojones delante de las cámaras para corroborar el aprecio que tiene a la Humanidad... sin asomo de rubor alguno y haciendo ostentación de una poca vergüenza dificilmente superable, quiere convencernos de que pongamos ciegamente en sus manos nuestros destinos... que el ya verá como los gestiona.
En España, por el contrario, sus homólogos "ideológicos" todavía no llegan a ser tan explícitos en sus enunciados totalitarios -y mucho menos en las formas- y confiando en la poca formación de la gran mayoría de la población, ese pueblo "soberano" cuando conviene, prefieren tergiversar burdamente y a mansalva para cobrar rápidamente el rédito político pertinente. Parece mentira, pero si miramos los resultados de las elecciones municipales, no hay asomo de castigo a quienes han mentido, mienten y manipulan de manera tan evidente y rastrera.
La sicología de masas es lo que tiene: funciona fácilmente aunque seas un zopenco y sale muy barato, su único coste es el desgaste que produce la insistencia machacona... por lo demás no hay nada como un buen tinte capilar para encubrir tanta mentira de las sienes.
¿Verdad señor Rajoy.? ¿Verdad señor Acebes.?

Me gustaría saber a que dios le rezan en realidad estas apariencias de hombre y verdugos de la honestidad, porque suponiendo que tan ausente entelequia existiera, no creo que le fuera posible escuchar las plegarias de esta hez de la humanidad sin vomitarles encima. Por otro lado no cabe en cabeza sana que yo y los que piensan como yo tengamos que condenarnos -en ese infierno de quita y pón- para que estos homúnculos suban a los cielos.
No saber disfrutar de tus privilegios sin joder a los demás no puede acabar bien.
Salud, Anarquía y cultura.
Se lamenta el flemático carnicero -por ejercito interpuesto- de tales contratiempos y aboga -para evitarle trances parecidos a sus colegas en el futuro- por un mayor control de INTERNET. Así, una vez controlado el último reducto donde el ciudadano excéptico puede acceder y confrontar versiones distintas a las oficiales, todo solucionado: vía libre a la impunidad y a la falta de control sobre los "delegados" de nuestros intereses. ¿Fácil, no.?
Solo su exquisita educación británica le ha impedido tocarse los cojones delante de las cámaras para corroborar el aprecio que tiene a la Humanidad... sin asomo de rubor alguno y haciendo ostentación de una poca vergüenza dificilmente superable, quiere convencernos de que pongamos ciegamente en sus manos nuestros destinos... que el ya verá como los gestiona.
En España, por el contrario, sus homólogos "ideológicos" todavía no llegan a ser tan explícitos en sus enunciados totalitarios -y mucho menos en las formas- y confiando en la poca formación de la gran mayoría de la población, ese pueblo "soberano" cuando conviene, prefieren tergiversar burdamente y a mansalva para cobrar rápidamente el rédito político pertinente. Parece mentira, pero si miramos los resultados de las elecciones municipales, no hay asomo de castigo a quienes han mentido, mienten y manipulan de manera tan evidente y rastrera.
La sicología de masas es lo que tiene: funciona fácilmente aunque seas un zopenco y sale muy barato, su único coste es el desgaste que produce la insistencia machacona... por lo demás no hay nada como un buen tinte capilar para encubrir tanta mentira de las sienes.
¿Verdad señor Rajoy.? ¿Verdad señor Acebes.?

Me gustaría saber a que dios le rezan en realidad estas apariencias de hombre y verdugos de la honestidad, porque suponiendo que tan ausente entelequia existiera, no creo que le fuera posible escuchar las plegarias de esta hez de la humanidad sin vomitarles encima. Por otro lado no cabe en cabeza sana que yo y los que piensan como yo tengamos que condenarnos -en ese infierno de quita y pón- para que estos homúnculos suban a los cielos.
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1 comentario:
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